El gracioso de la tribu

Algunas de sus vi�etas humor�sticas que publica en distintos medios han enfurecido a m�s de alg�n dirigente mapuche. �Supe, por terceros, que a Auc�n no le gustaban mis dibujos, tampoco a Jos� Santos Millao ni a la gente de la CAM�, se�ala. Con los mapuches comunes y corrientes no hay problemas, cuenta Melinao, ya que seg�n �l �las bases� tienen m�s sentido del humor que la dirigencia.

�Cuando vas a ver a los pe�i, se r�en de la represi�n, porque muchas veces los mismos pacos que los est�n apaleando son mapuches. Incluso las mismas comunidades se ponen a jugar a la pelota con los pacos de las comisar�as. A los pe�i eso les hace gracia, porque comprenden que en el fondo es su trabajo. Claro que, para los dirigentes, ese tipo de cosas no se deben decir, porque contradicen el discurso pol�tico. Pero son situaciones humor�sticas reales�. �l las usa. Y afronta los problemas. Mal que mal es el gracioso de la tribu.

Claro que para llegar al humor primero hay que ser serio. Y Pedro era un ni�o mapuche bien serio trasplantado a Santiago al que le interesaban las historias de batallas y h�roes. Las que hab�a escuchado de boca de su padre y las que ve�a en la tele. Por un lado estaban Sam el Rey del Judo, Centella y Festival de los Robots y, por otro, los relatos de su padre al almuerzo.

�Mi viejo nos contaba la historia de Lautaro y Caupolic�n. Y yo me pasaba los rollos de las peleas y dibujaba cosas re sangrientas, como a Galvarino cuando le cortaban las manos y segu�a luchando. Tambi�n me gustaba la imagen del h�roe griego, lo encontraba similar al guerrero mapuche, con su torso desnudo�. Un verdadero mix de influencias.

Para agregarle m�s �pica a su vida, comenz� a militar en el Partido Socialista (PS) a los 14 a�os y se enrol� directo en la Brigada Elmo Catal�n. Siempre narrando historias, pero ahora a pared completa. El entusiasmo le durar�a hasta el a�o �92 cuando comenzaron las marchas mapuches en contra de la conmemoraci�n de los 500 a�os del descubrimiento de Am�rica.

�Ah� me fui del PS porque nos prohib�an a los mapuches ir a marchas, que era como que te prohibieran ser mapuche�. Eso y encontrarse ya en la universidad con dibujantes afines, lo hizo meterse de lleno en el mundo del c�mic. A punta de fotocopias empez� a desarrollar historias largas y dram�ticas con los problemas de su pueblo. Historias de opresi�n y muerte en blanco y negro.

El viraje vino cuando lo invitaron a participar en un peri�dico quincenal llamado "El Kiosco de la Esquina", donde public� sus primeras vie�etas de humor y tuvo sus primeros problemas. El paso siguiente fue internet. Cuando sus pe�i m�s viejos ve�an sus monos en las revistas, le dec�an al dependiente que no les gustaban porque, para ellos, �el c�mic nunca ha sido algo mapuche�.

Pedro piensa que no es as� y que s� hay una ra�z com�n: �El formato del c�mic se asemeja mucho a los relatos mapuches, en ellos hay harta oralidad, pero tambi�n hay gestos. El orador mapuche, aparte de contar la historia que narra, tambi�n la act�a�. As� lo hac�a su padre con �l. As� �l rellenaba el decorado en su cabeza.

Por ello tambi�n decidi� hablarle a su pueblo sobre los temas que les son propios. �Con Pedro Cayuqueo (el director de Azkintuwe y MapucheTimes) concluimos que la madurez del movimiento mapuche pasa por dejar de escribir para militantes, de convencer a los convencidos y atrevernos a dialogar con el mapuche y el chileno com�n y corriente. Por eso agregamos humor al peri�dico. Adem�s de historias que los mismos lectores nos van contando�, se�ala.

Porque para Melinao hay algo fundamental; los medios no retratan a los mapuches tal como son. Ni los oficiales, que emiten juicios de valor arbitrarios y descontextualizados, ni los alternativos, que suben ladrillos de contenido a la web en forma de manifiestos continuos donde lo que prima es la caricatura del weichafe o guerrero m�stico.

�El mapuche ya no quiere que le hablen m�s de violencia, est� cansado de esa imagen belicosa. Sale en los diarios y en la prensa alternativa de la misma forma�. Por eso �l dibuja una tira semanal llegando del trabajo. Lo hace para Azkintuwe, MapucheTimes y otros medios regionales. Dibuja entre las once de la noche y las dos de la ma�ana, quit�ndole horas al sue�o o al descanso. Lo hace s�lo para hacer re�r, �sa es su manera de militar en la causa mapuche y realizar un aporte, subraya. �Yo no puedo ir a marchas, porque me toca trabajar todo el d�a... Adem�s, para tirar piedras, cualquiera�, se�ala provocador.

Pero a Melinao tambi�n le interesa fomentar el arte gr�fico, sobre todo en las nuevas generaciones de mapuches. Fue as� que durante el 2011 se desempe�� como director de suplemento cultural �Koyon�, inserto en el peri�dico Azkintuwe, y donde dio a conocer el trabajo gr�fico de numerosos artistas mapuche. �Fueron seis ediciones donde entrevistamos a gente como Daniel Bernal, un artista gr�fico de la regi�n que se maneja bastante en lo digital, Ariel Traipe y los muchachos de �Ayekan�, una empresa gestora de contenidos educativos y de entretenci�n basados en el Kimun y Rakizuam mapuche, etc.�, se�ala.

�Tambien entrevistamos a quienes, a mi juicio iniciaron el muralismo y la pintura mapuche actual, con un discurso, una est�tica, me refiero a Juan Silva Painequeo, Cristian Collipal y un pe�i que no dibujaba pero que siempre estaba ah� que era Jaime Llanquileo�, subraya. Es Pedro Melinao, un gracioso a tomar en serio.